El jamón cortado a mano posee ácido oleico lo que hace que pueda disminuir el nivel de padecer enfermedades cardiovasculares en comparación con el consumo de otros productos ibéricos. Crea un efecto beneficioso sobre el colesterol en sangre, ya que incrementa la tasa de colesterol bueno (HDL) y reduce el que perjudica (LDL). Es un alimento alto en proteínas y vitaminas, con un aporte energético que no afectará a las dietas hipocalóricas. Es un producto que se puede consumir sólo, está cortado para que respete todas las características de la textura y del sabor. Cuando se consume con acompañamiento, resalta alimentos como ensaladas de tomates, quesos suaves para no perder sabor y maridar con un vino de calidad a su gusto, recomendamos blanco incluso algún espumoso. Para disfrutar del sabor y la calidad de los ibéricos, lo mejor es mantener el producto en un lugar seco y fresco evitando la exposición directa a la luz del sol y al aire. Se recomienda tapar el envase con un film transparente para seguir conservando la grasa natural del jamón y no pierda sus propiedades.